domingo, 20 de mayo de 2012

Capitulo 18: Conociendo a Teddy Lupin y la herencia de los Trelawney

La guerra contra Adam está al rojo vivo. Durante las últimas semanas ha habido millones de ataques, desde bromas simples como pegarle a la silla de clase con pegamento y cuando se levantara se quedara sin un trozo del pantalón, tirarle un cubo de agua sucia a la cabeza, la típica pedorreta cuando se sentaba etc. hasta bromas pesadas como correr el rumor de que él y Sam son pareja, teñirle el pelo de verde, decir a todas las chicas del colegio que no eran tan hombre parece ( creo que ya me entendéis al decir eso) y contar a todos que para desayunar se tomaba una caja entera de esteroides para tener ese cuerpo ( este rumor solo funciono en los alumnos con padres muggles o alumnos que estudiaban estudios muggles, porque los demás no saben que son los esteroides).
Pero no os creeros que él ha sido un angelito, sus bromas simples han sido colgar mi ropa interior en la sala común (no sé cómo se metió en mi habitación) y crear una blanca y larga barba, típica de Merlín, en mi cara. Y sin mencionar las bromas pesadas como correr el rumor de que yo nunca había estado en casa estudiando sino que estuve en un colegio y que me echaron por ser muy problemática, había agredido a cinco profesores y a no sé cuántos alumnos, después de eso todos me temían y se iban corriendo. Pero la peor broma fue sin duda la que me hizo ayer, me quito mi ropa cuando estaba duchándome en las duchas del vestuario que está en el campo de Quidditch. Y tuve que salir con una toalla (bastante pequeña) a buscar a alguien que me ayudara y para mi desgracia me encontré con el equipo de Quidditch de Slyterin. A partir d ese momento me convertir en la delincuente exhibicionista. Me las iba a pagar!!!
En estos momentos me encuentro sola paseando por los pasillos de la escuela, Jerry esta con Alyson y Melinda (tenemos que deshacernos de Mel de una forma disimulada) y Natalie estaba hablando con su hermano, Taylor. Tenía que buscar una venganza para Adam, no se me ocurre nada en estos momentos, pero encontrare algo o sino le preguntare a Jack. Desde que se me declaro, estamos más unidos, no significa que seamos novios. Todavía no le he contestado y no sé qué contestarle. Es un chico agradable y me gusta pero no estoy segura, además no puedo concentrarme en eso tengo pendiente la guerra contra Adam, y eso necesita todo mi tiempo. Interpongo a un chico encantador por el estúpido Adam, soy TONTA. Pero parece que Jack no me está presionando, así que lo dejare correr. Además me lo paso genial con él y no quiero estropearlo.
Llegue al patio de transformaciones, tomaría un poco de aire fresco hasta la siguiente hora que al ser mi hora libre (Sí, soy la única de mi curso que tiene hora libre. Es lo que tiene que tus padres te enseñen más de lo que deben y luego en el colegio no necesites otra hora de clase. Me siento como un bicho raro empollón) me iría a visitar a Hagrid o a Steven y a los demás. Iba a sentarme en un banco cuando oí a un grupo que estaban rodeando a alguien no veía a la persona rodeada pero oí su sollozo. Se estaban burlando de él.
Entonces decidí a acercarme para mejor. Cuando me acerque les vi, el grupito de Bianca (sin Jack) estaban rodeando a un chico de primero (tenia pinta de tener once años) mientras se burlaban de él y le daban pequeños empujones. Al verles me acerque sin pensarlo dos veces.
-Vas a ponerte a llorar monstruito-Dijo Marcus, el bobo amigo de Bianca, al pequeño muchacho y luego le empujo con más fuerza, el muchacho se tambaleo y tropezó. Pero antes de que llegara al suelo me hice paso entre las dos atolondradas amigas de Bianca y le cogí para que no se cayera al suelo.
-Pero ¿qué os pasa? ¿Sois estúpidos o qué?- Les pregunte casi chillando.
-Hey, tranquila delincuente juvenil- Dijo Bianca acercándose a mí, como odiaba ese mote- Solo estaban diciéndole al pequeño Teddy que no nos gusta los bichos raros como él.
-Luego se ha puesto gallito y le hemos tenido que menear un poco- Dijo Marcus.
-Se cree que puede contestarnos de ese modo-Dijeron a la vez las amigas rubias de Bianca.
- Es patético- Dijo Riley cruzado de brazos.
Yo estaba alucinando con su actitud.
-Pero ¿cómo os atrevéis a tratarle así?-dije esta vez chillando
-Es un hibrido metaforfogo, ¿cómo quieres que le tratemos? Es inferior a nosotros, no se merece respeto por nuestra parte. No sé cómo le dejaron entrar en Hogwarts-Me dijo Bianca con esos aires de superioridad que tanto odiaba.
Más alucinada que antes intente contestarla, pero Marcus se adelantó y dijo:
-Además si queremos empujarle, lo hacemos-Y empujo con todas sus fuerzas a Teddy, no me dio tiempo a sujetarle y cayó al suelo. Enfurecida me dirigí a Marcus y le dije en un tono amenazador:
-Ni se te ocurra volver a empujarle
-¿O que, me vas a pegar?-Dijo con un tono burlón y desafiante.
-Marcus ¿no te creerás ese rumor? Estoy seguro que es mentira, ella es incapaz de pegar a nadie, con verla se nota que no ganaría a nadie-Dijo Riley, detrás mío.
Quería decirle que estaba equivocado y que se lo demostraría a él y a Marcus. Pero si me peleaba, seguro que me volverían a castigar y no quería otro castigo y lo que menos quería es que mis padres supieran que se artes marciales. Stan tendría grandes problemas, sobretodo con mi padre. Así que me limite a decir:
-Lo haría, pero no quiero mancharme las manos con alguien como vosotros-Vale, suena muy chulo, pero no iba a limitarme a no decir nada e irme. Entonces le di la espalda a Marcus y cogió a Teddy del brazo-Vámonos Teddy.
Antes de que nos fuéramos de ahí, note un brazo alrededor de mi cuello.
-No huyas nena-Oí la voz de Marcus en mi oído

-Suéltame-Dije de manera tranquila, no quería parecer asustada. No lo estaba, pero me daba un poco de grima que el feo e idiota de Marcus se acercara a mí de esa manera.
-Me parece que no-Dijo el, poniendo su otro brazo alrededor de me cintura-Um, hueles muy bien.
Ahora si tenía ganas de vomitar. Vi como Teddy se acercaba a nosotros, él quería ayudarme. Pero antes de que se acercara, lo decidí. Me defenderé, aunque eso suponga otro castigo.
Entonces le di un codazo en el estómago con todas mis fuerzas, el me soltó. Antes de que reaccionara le cogió del brazo y lo retorcí con una llave que me enseño Stan. El chillo, y yo hice más fuerza, él estaba dándome la espalda, y con mi otra mano le empuje en contra la pared.
-No me vuelvas a tocas- Las amigas de Bianca empezaron a chillar como locas, Bianca no decía nada, Riley estaba alucinado y Teddy está feliz- Ahora pídele perdón a Teddy por lo que le has dicho y hecho-Marcus no dijo nada- Pídele perdón-Chille mientras le cogía del pelo y levantaba su enorme cabeza. No quiera ser tan perra, pero no tenía otra elección.
-Lo siento-dijo en voz muy baja
-¿Cómo? No te hemos oído, mas alto-Dije agarrando su cabeza con más fuerza.
-Perdón, lo siento-Chillo.
-Así me gusta-Reí- Te soltare, pero con vuelvas a meterte con Teddy y conmigo te romperé el brazo, entendido?- El asintió y le solté.
Las amigas de Bianca y Riley se acercaron a él.
-¿Estas bien?-Pregunto una de las chicas
-Me duele-Chillo Marcus
-Te llevaremos a la enfermería-Dijo Riley con voz tranquila
Entonces las dos chicas y Riley llevaron a Marcus. Pero Bianca no se fue con ellos, me miro y se acercó.
-Estoy harta de ti. Pensé en no darte el privilegio de destruirte, pero se acabó. Te vas a enterar, nadie se mete con mis amigos.-Entonces se dio la vuelta y su larga melena me dio en toda la cara y se fue.
-Eso ha sido un alucine-Dijo Teddy cuando Bianca desapareció del pasillo.
-Gracias, creo.
-¿Me podrías enseñar a hacer eso?
-¿Qué? Teddy no es un juego, por cualquier fallo puedes hacer mucho daño a alguien e incluso podrías matarla-Soné a Stan, fue lo primero que me dijo cuando empezamos a practicar luchar hace años.
-Ya sé que no es un juego. Yo solo lo que quiero defenderme, no quiero que nadie me vuelva a llamar estúpido hibrido metamorfogo, no lo voy a consentir.
La rabia de Teddy me llego al corazón, no quería ser débil quería defenderse por sí mismo. Quiere ser independiente, como yo, me recuerda mucho a mí.
-Te enseñare a cómo defenderte y nada más-Dije de forma severa.
-¿Sabes hacer más cosas?
Ignore su pregunta- Te advierto que esto no va ser nada fácil, es muy duro
-De acuerdo, lo aguantare. Hare esto por el honor de mi familia. No permitiré que nadie se meta con mis raíces.
Me quede pensando estos le habían llamado hibrido metamorfogo, eso me suena de algo.
-¿Tu eres el hijo de Remus Lupin y Nympadora Tonks?
-Sí, soy Teddy Lupin.
- Encantada soy Cassidy Calaway-Le di la mano- Ya sé que todo el mundo te lo ha dicho pero… mis condolencias por lo de tus padres.
-Gracias-Vi tristeza en la mirada del pequeño-Bueno ¿cuando empezamos?-Cambio de tema repentinamente.
-Después de Navidades, vale?
-Ok, muchas gracias Cassidy-Me abrazo- Dentro de poco yo te defenderé de los demás-Bromeo y se fue corriendo, que la sirena ya había sonado.
Me quedo sola en menos de un segundo. Ya era mi hora de descanso. Bueno iré a visitar a visitar a Steven y a los demás, no creo que tenga clase a ahora. Me encamine a buscarles, iba cruzar por el pasillo. Cuando un hombro me golpeo y las cosas de la otra persona se cayeron al suelo.
-Lo siento-Dije mientras ayudaba a la señora a coger sus cosas.
-No pasa nada, querida-Me dijo la señora. La mujer era larguirucha, lucia muchos abalorios brillantes, llevaba un chal vaporoso decorado con lentejuelas y unas gafas que aumentan el tamaño de sus ojos. Llevaba el pelo alborotado y parecía agitada. Nunca había visto a esta mujer. Al coger su libro, titulado Dispar las nieblas del futuro y su bola de cristal, me di cuenta de que era la profesora de adivinación. Por eso no la conocía. Yo no cursaba esa asignatura, mejor dicho yo nunca curse esa asignatura. Le entregue sus cosas, nuestras manos se tocaron y ahí fue cuando algo raro sucedió. Se puso a temblar, sus ojos se pusieron blanco y empezó a chillar.
-Señora ¿se encuentra bien?- Pregunte, pero no obtuve respuesta.
Cinco segundos más tarde abrió los ojos de forma repentina, eso me asusto un poco.
-Tú… eres tú. No me lo puedo creer-Dijo con voz temblorosa
- Si soy yo-Dije más preocupada que asustada, esta mujer se ha vuelto loca…
De repente cogió sus cosas con un mano y con la otra me cogió del brazo, se levantó y empezó a andar rápidamente. Intentaba preguntarle adonde me lleva baba, pero parecía muy ocupada hablando consigo misma. Al fin llegamos a una clase (clase de adivinación), y para mi desgracia no estábamos solas. Estaba llena de alumnos de mi curso, estaban Gryffindor y Slytherin. Pude ver a Sam y a Adam en una mesa de la esquina.
La profesora de Adivinación dejo sus cosas encima de la mesa y me indico que me sentara en su silla.
-Cuando acabe la clase, te lo explicare todo. Ahora escucha y aprende, lo necesitaras muy pronto- Entonces la profesora me dejo en su sitio y se dirigió al centro de la clase-Bueno chicos seguiremos con lo que hicimos ayer…
La puerta se abrió y entraron dos chicos, al estar al fondo de la clase y tener la mesa de la profesora repleta de libros tantos libros que formaban montañas, no pude ver quien entraba.
-¿Pero que le ha pasado?-Pregunto la profesora horrorizada.
Cuando lo chicos se acercaron pude ver quiénes eran.
-Tranquila, se ha dislocado el hombro. En un par de días estará bien-Dijo tranquilamente Riley.
-Estoy bien, no se preocupe-dijo Marcus quitándole importancia al asunto.
-Pues siéntense que ya ha empezado la clase.
Ellos se sentaron, pero antes se fijaron en mí. Aunque estuviera entre tantos libros se me veía perfectamente. Sus miradas gélidas y odiosas me recorrieron el cuerpo. Pero ellos no eran los únicos que me estaban mirando, al otro lado estaban Sam y Adam que me miraban sorprendidos, no sabían que hacia yo aquí, pues yo menos…
Sam me hizo señas preguntándomelo y mi respuesta fue simplemente encogerme de hombros. Por su parte la profesora empezó la clase, y estuvo hablando durante toda la hora. Oráculos, profecías, videntes… eso me sonaba a chino, me menos mal que la clase termino.
Todos salieron, y nos quedamos solas. Ella se acercó a mí, me observo durante unos segundos.
-Eres igual que ella-dijo con nostalgia.
-¿A quién?-Pregunte desconcertada.
La profesora se acercó a su cajón de su mesa y de ahí saco una foto- A Clarie Trelawney- me entrego la foto. No podía ver lo que mis ojos estaban viendo.
En ella había una chica que se parecía mucho a mí, bueno era yo. La única diferencia era que ella tenía el pelo hasta los hombros rizado y sus ojos eran de color claro.
-Pero…- intente decir pero ella me interrumpió.
-Te pareces a ella. Tanto que incluso podrías ser gemelas. Tranquila, te lo explicare desde el principio. En 1814 nació Clarie Trelawney, fue la primera de la estirpe en tener el poder de la clarividencia. Era la más poderosa vidente de su época. Pasaron los años y ella se casó y tuvo dos preciosas hijas, Celeste y Aura. Celeste, la mayor, nunca recibió el poder de la clarividencia, mientras que su pequeña hermana sí. Celeste llena de rabia exigía tener ese poder, Clarie intento con todo su corazón explicarle que era imposible y que tenía que conformarse con ser una bruja. Ella no quería admitirlo, entonces se fue y no volvió a volver a ver a su familia nunca más. Se deshizo del apellido Trelawney. Y eso produjo una ruptura en el clan de los Trelawney.
-¿Pero eso que tiene que ver conmigo?
-Tiene mucho que ver, porque perteneces a la familia de Celeste. Por eso te pareces tanto a Clarie, es por eso que no te conocía y es por eso que tuve una visión contigo y con tus poderes.
-Yo soy una Calaway, no Trelawney, Y no puedo ver el futuro.
-Si puedes. Antes de morir Clarie profetizo que un miembro de su familia tendría más poderes de los que antes nadie ha tenido, y esa eres tú. Te vi en mi visión. Perteneces a la rama de Celeste, a los no creyentes en clarividencia. Aunque ella no tenía visiones, tienes sangre de Clarie y te pareces mucho a ella. Eres tu… la más poderosa de la profetisas.-La profesora esta radiante.
Yo estaba alucinando, esta mujer está muy loca. Yo teniendo visiones… Era verdad que en mi familia no creían en nada de visiones y esas cosas, pero ¿quién no?, es solo un cuento de viejas. Pero Clarie es idéntica a mí, y no creo en las coincidencias. Todo sucede por alguna razón.
-Todavía no se te han activados los poderes, así que tenemos que trabajar duro. Me gustaría que te quedaras a estas clases que doy a tus compañeros de curos y también podrías quedar conmigo alguna tarde y pudo explicarte todo lo que quieras, claro si quieres?
No sabía que contestar, en parte no creía anda y por otro si creía en algo. Por intentarlo no me cuesta nada.
-De acuerdo, no tengo ningún inconveniente- Adiós a mi hora libre T.T
- Hay que trabajara mucho antes de la activación.
- ¿Qué es eso de la activación?
- Cuando uno está destinado al arte de la adivinación en un momento de su vida, no más tarde de los 20, sufre una recarga en el cuerpo-Eso me empezó a asustar- Para decirlo de otra manera se siente una ola de calor por el cuerpo, luego te mareas y si estas de pie, como me paso a mí, te desmayas.
-¿Desmayarse? Yo me desmaye hace unas semanas y antes sentí calor y mareos, no será que ya me activado? Pero la enfermera Pomfrey dijo que era por el estrés.
-Pero ella que va saber sobre esto-Sé quedo segundos en silencio- YA TE HAS ACTIVADO-Chillo con fuerza-Tenemos que empezar cuanto antes, mañana hay clase así que tienes que venir. Cuando volvamos de las vacaciones de Navidad te pondré un horario en el que te marcare las horas que puedes venir-empezó a pasearse por toda la clase- Tenemos tanto que hacer.
Yo lo único que hacía era asentir, creo que me he metido en un lio de espanto, además tengo que dar clases de lucha a Teddy. No tendré tiempo para nada.
-Sera mejor que te vayas a tu siguiente clase, que llegas tarde.
- Ok, nos vemos mañana profesora Trelawney- Dije dirigiéndome a la puerta.
-Cuando no este dando clase puedes llamarme Sybill o si quieres tía, somos de la misma familia.
-De acuerdo Sybill- Llamarla tía no me parecía todavía apropiado. Pero antes de irme me quiera llevar algo- Esto… Sybill, ¿me podría quedar con la foto de Clarie?
-Por supuesto-Me la entrego- De todos modos es como tu vida pasada
No quise preguntarle que era una vida pasa y me fui de esa clase con la foto de antepasada Clarie Trelawney. Somos idénticas, pero algo dentro de ella la hace diferente a mí, es como si pudiera ver su alma en esa simple foto. Joe… ahora sueno como mi nueva "tía", me parece ridículo, pero algo dentro de mi cree lo contrario. Soy la más poderosa de las profetisas, ¿mi vida puede ser más rara?

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